La concentración contra la violencia machista convocada por el Consejo de la Mujer de Toledo ha contado con la presencia de varios miembros de Ciudadanos, entre ellos, los concejales del Ayuntamiento de la capital regional, Esteban Paños y Araceli de la Calle, el delegado territorial, Antonio López, y el subdelegado territorial en la provincia, Miguel Millán.

En esta ocasión, la lectura del manifiesto de condena ha corrido a cargo de Esteban Paños, concejal de C’s en el Ayuntamiento de Toledo, quien ha comenzado el acto recordado a las tres mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas el pasado mes de abril: “Carmen. Cristina. Yolanda. No escucharán hoy nuestras palabras. Ni el mes que viene. Ni el siguiente. Porque ya no están aquí. Fueron asesinadas en abril. A manos de un hombre. Y se suman así a una larguísima lista de víctimas”. Paños ha recordado que la violencia machista va más allá de la violencia física: “no es sólo la imagen de una mujer demacrada con un ojo morado, sino un problema estructural” que también afecta “al ámbito social, económico, psicológico y laboral”, entre otros.

ChhNwRSWkAAPX-C[1]

Esteban Paños ha asegurado que la violencia machista es un problema de todos que afecta al conjunto de la sociedad: “este tipo de hombres, los que menosprecian, humillan, violan, amenazan, acongojan, golpean y asesinan a una mujer, solo por hecho de ser mujer, acaban con ellas. Pero no sólo con ellas. Destrozan también sus hogares, a sus hijos, a sus familiares, a sus amigos. Y, al final, tenemos una sociedad que está herida de muerte”. En su discurso ha recordado los avances que se han logrado hasta el momento, pero ha insistido en que “seguimos maltrechos” y por eso “no podemos conformarnos, debemos seguir luchando y redoblar esfuerzos”. En este sentido, el concejal del Ayuntamiento de Toledo ha apostado por trabajar para “acabar con el escenario de ventajas que los hombres hemos disfrutado tradicionalmente y que perpetúan la desigualdad entre sexos”. También ha incidido en la necesidad de “desterrar la idea de que amar implica sufrimiento y dolor”. Paños ha añadido que ha llegado la hora “de que cada mujer sea reconocida como lo que es: un miembro de pleno derecho de la comunidad” y que es el momento “de ser valientes, no guardar más silencio y dar voz, apoyo y recursos a todas las víctimas”. Por último, ha incidido en la necesidad de “educar hoy en la igualdad y el respeto para prevenir la violencia de mañana”. Tras la lectura del manifiesto se ha guardado un minuto de silencio y se han encendido varias velas en honor a las víctimas. Al acto, han acudido miembros de varios colectivos de la ciudad como AHIGE, María de Padilla, Bolo Bolo; asociaciones vecinales como la de Alcántara, la Cornisa y la Voz del Barrio, así como varios miembros de la Corporación municipal, todos aglutinados en el Consejo Local de la Mujer.