Los ediles de la formación naranja apuntan que litigios abiertos como el del Bosque de Acero o los que se puedan abrir por la urbanización de Villa Román IV también podrían pasar factura a las arcas municipales; y recuerdan que “presuntas irregularidades en facturas del Plan Urbana de San Antón ya pusieron en riesgo la obtención de fondos por parte de la UE”
Los ediles de la formación naranja subrayan que “las formas poco ortodoxas de proceder de los dirigentes municipales durante las últimas legislaturas van a volver a pasar factura a las maltrechas arcas municipales” y, por consiguiente, a los conquenses, “que van a ver cómo se dejan de acometer nuevos proyectos para abonar otros de cuestionada utilidad cuya financiación debería haber corrido a cargo del Estado”.
Desde Cs señalan que el caso del carril bici –ya con consecuencias ciertas- no es puntual; y recuerdan que “presuntas irregularidades en algunas facturas del Plan Urbana de San Antón ya pusieron en riesgo la obtención de fondos por parte de la UE”.
Por otro lado, los ediles añaden que litigios abiertos por cuestiones como la financiación del Bosque de Acero, o los que se puedan abrir por la urbanización de Villa Román IV, “también podrían pasar factura al Ayuntamiento de fallarse sentencias desfavorables a los intereses municipales”. Y que el traslado de la planta de tratamiento de residuos sólidos, también va a suponer a las administraciones un nuevo desembolso “por la mala planificación”.
Cs lamenta que el Ayuntamiento tenga que devolver una parte de los 500.000 euros que costó el carril bici “por la mala gestión municipal”
El Grupo Municipal Ciudadanos preguntará al equipo de Gobierno de Ángel Mariscal –quien fue concejal de Medio Ambiente durante la legislatura de Francisco Javier Pulido, bajo la que se construyó el carril bici- con qué partidas se hará frente a este imprevisto, y a costa de qué. En este sentido, recuerda al primer edil que los presupuestos municipales de 2017 siguen sin aprobarse, y que aún no han obtenido respuesta a su petición de negociación.
El carril bici entre el parque de Los Príncipes y la Universidad a lo largo de la Ronda Oeste se construyó en 2010 con cargos al Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad.
Tuvo un presupuesto de unos 500.000 euros y fue uno de los proyectos más cuestionados de los realizados bajo el Plan E. Incluso por los propios ciclistas, que decían que no reunían las condiciones idóneas para circular.